ABREBOCAS DE MI PRÓXIMO LIBRO
INTRODUCCION
La verdadera medicina no es la que “cura”, sino la que previene; la higiene es la verdadera medicina. Más que recomponer los miembros desechos del que cae rebotando por un despeñadero, vale indicar el modo de apartarse de el."
José Martí (Poeta Cubano)
El conocimiento de las cosas nos da el poder de decidir y optar por la mejor opción para tener éxito en nuestras vidas. Muchas veces cuando estoy atendiendo una consulta, percibo en el paciente y sus familiares el desinterés en actos tan humanos, como es el de asistir en consulta a una persona, comentarle nuestros mas profundos secretos, dejar que nos revise y confiar en un tratamiento para curar o prevenir algo tan irreparable como es la perdida de la vida o el deterioro de la salud.
Deduzco que para nosotros como pacientes esto de consultar al médico puede ser rutinario y dejamos que recaiga toda la responsabilidad en el Doctor, no somos conscientes que debemos reflejar nuestro amor propio en el interés de lo que nos aqueja y aportar la máxima información, y tratar de brindar al médico las herramientas y la importancia que merece nuestra vida. Precisamente una de las cosas que primero debemos hacer es tener unos conocimientos básicos de cómo mantener un bien tan preciado como es nuestra salud y la vida misma.
Otro ejemplo que ya en mi área de especialista noto con frecuencia, es que la familia, como núcleo central de la sociedad, percibe en el embarazo y el parto como algo rutinario. En este proceso No expresamos nuestra humanidad, en reconocer la importancia de traer a nuestro hijo al mundo, un ser irrepetible y con tantas características y potenciales.
Cuantas madrugadas atendiendo un parto con una madre sin el mínimo conocimiento de todo lo que conlleva su maternidad, nerviosa por desconocer lo que le va a pasar, abrumada por el dolor y la incertidumbre de la responsabilidad socio - económica , por el abandono a que es sometida por la comunidad, generalmente sin un esposo acompañándola ni dándole aliento. Generalmente es la abuela o algún familiar que queda a la expectativa.
La madre se alegra al recibirlo, pero he visto muchas que lo rechazan, seguramente llevadas por mitos y tabúes o por el mismo estado de estrés. En la familia en vez de alegría explosiva, muchas veces lo que se hace es una rutina de revisión de la paciente a ver que daño le hicieron en el hospital y poder quejarse.
Yo quisiera comparar este momento con un partido de nuestra selección nacional, entonces veo a toda la población aglomerada en la vitrina viendo el televisor, se siente la unión, a pesar de no conocerse se abrazan y celebran un gol, pero la traída al mundo de un nuevo ser, tu hijo tiende a ser algo rutinario.
Este libro esta hecho para estimular a todos, las ganas de llevar un embarazo con éxito, con amor y conocer de este proceso irrepetible como es concebir y traer un ser al mundo para nuestra grandeza y felicidad.
La verdadera medicina no es la que “cura”, sino la que previene; la higiene es la verdadera medicina. Más que recomponer los miembros desechos del que cae rebotando por un despeñadero, vale indicar el modo de apartarse de el."
José Martí (Poeta Cubano)
El conocimiento de las cosas nos da el poder de decidir y optar por la mejor opción para tener éxito en nuestras vidas. Muchas veces cuando estoy atendiendo una consulta, percibo en el paciente y sus familiares el desinterés en actos tan humanos, como es el de asistir en consulta a una persona, comentarle nuestros mas profundos secretos, dejar que nos revise y confiar en un tratamiento para curar o prevenir algo tan irreparable como es la perdida de la vida o el deterioro de la salud.
Deduzco que para nosotros como pacientes esto de consultar al médico puede ser rutinario y dejamos que recaiga toda la responsabilidad en el Doctor, no somos conscientes que debemos reflejar nuestro amor propio en el interés de lo que nos aqueja y aportar la máxima información, y tratar de brindar al médico las herramientas y la importancia que merece nuestra vida. Precisamente una de las cosas que primero debemos hacer es tener unos conocimientos básicos de cómo mantener un bien tan preciado como es nuestra salud y la vida misma.
Otro ejemplo que ya en mi área de especialista noto con frecuencia, es que la familia, como núcleo central de la sociedad, percibe en el embarazo y el parto como algo rutinario. En este proceso No expresamos nuestra humanidad, en reconocer la importancia de traer a nuestro hijo al mundo, un ser irrepetible y con tantas características y potenciales.
Cuantas madrugadas atendiendo un parto con una madre sin el mínimo conocimiento de todo lo que conlleva su maternidad, nerviosa por desconocer lo que le va a pasar, abrumada por el dolor y la incertidumbre de la responsabilidad socio - económica , por el abandono a que es sometida por la comunidad, generalmente sin un esposo acompañándola ni dándole aliento. Generalmente es la abuela o algún familiar que queda a la expectativa.
La madre se alegra al recibirlo, pero he visto muchas que lo rechazan, seguramente llevadas por mitos y tabúes o por el mismo estado de estrés. En la familia en vez de alegría explosiva, muchas veces lo que se hace es una rutina de revisión de la paciente a ver que daño le hicieron en el hospital y poder quejarse.
Yo quisiera comparar este momento con un partido de nuestra selección nacional, entonces veo a toda la población aglomerada en la vitrina viendo el televisor, se siente la unión, a pesar de no conocerse se abrazan y celebran un gol, pero la traída al mundo de un nuevo ser, tu hijo tiende a ser algo rutinario.
Este libro esta hecho para estimular a todos, las ganas de llevar un embarazo con éxito, con amor y conocer de este proceso irrepetible como es concebir y traer un ser al mundo para nuestra grandeza y felicidad.
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