5. Quinta parte. LAS ANALECTAS - CONFUCIO

5. Quinta parte. LAS ANALECTAS - CONFUCIO
Jaime Barrios Nassi


Siempre he querido estar aquí, en las murallas chinas, se ven impetuosas y serpenteantes, que maravilla de ingeniería. En una esquina entre bloques deslustrados, y aires de eternidad, vemos una silueta singular, puede ser cualquier personaje chino, de los cinco siglos antes de Cristo, en el tiempo de la quinta dinastía y los Díez reinos. Es el gran maestro Kong, para nosotros Confucio alias el “Maestro Sensei”.

  • ya deja de ponerle apodos a los personajes, de pronto a los chinos no les gusta 
  • Bueno, pero recuerda que estamos en el quinientos cuarenta (540) antes de cristo, todavía no hay apellidos en estos mandarines.
  • Entonces debe llamarse Confucio de Zhou Lu, ya que ese es su lugar de nacimiento.
  • Ah, sí, Recuerdo una película en donde fue nombrado ministro de justicia en uno de esos reinos, y él quería moralizarlos y civilizarlos con educación, y rescató a una niña esclava que la iban a enterrar en vida con su amo, con una estrategia espectacular...

Mientras Fadiman y yo hablábamos Confucio recitaba un poema:

“Flota alrededor, ese bote de madera de ciprés,
Ahora aquí, ahora allí, como por la corriente transmitida.
Ni el descanso ni el sueño vienen en mi estado de ánimo preocupado;
Sufro como cuando la herida dolorosa se ha desgarrado
El cuerpo encogido.  
Por lo tanto, hábito triste,
Y musa sin rumbo, mis pensamientos de pena llenos.
Podría con el vino refrescar mi espíritu desgastado;
Podría salir y, pasear, tratar de enfriarme.
La fiebre de mi corazón;  pero el dolor tiene una regla hosca”.

  • y ese poema, es tuyo? - dirigiéndome a el le dije-.
  • No, es el maestro de Pei, recomiendo la lectura de poemas, sirve para reflexionar y apreciar la belleza.
  • Todos los funcionarios se los deben aprender de memoria, se que el maestro Confucio está ayudando en la recopilación de los 305 poemas que lo componen, con el nombre del shi Jin.
  • Eres un gran maestro, es por eso que el día de tu nacimiento, celebran en China el Día del maestro, nosotros en Colombia lo celebramos el 15 de Mayo en honor a otro gran maestro; Juan Bautista De la Salle. - dije- 
  • ¿Qué te inspiró a fundar esta religión? - pregunté -.
  • Ah no quiero fundar una religión, realmente mi intención es orientar a los gobernantes y al pueblo en estos momentos tan críticos de la vida, con tantas guerras, violencia y mala administración, y crear una humanidad, una caballerosidad, una ritualidad y que todos sigan el camino del Tao, del bien.
  • Caramba, pero toda esta situación que describes se parece a lo que estamos viviendo en la actualidad.- dije-.
  • Así es el maestro Confucio vive en una época de grandes cambios, a pesar de que su familia era de linaje, nació pobre, pasa viajando y compartiendo enseñanzas con sus discípulos, estos recogerán esas enseñanzas y vivencias en un libro llamado las analectas y estos mismos discípulos convertirán esta práctica en una religión - comentó Fadiman-
  • Bueno, lo que hago es compartir mi camino y tratar de influenciar a los gobernantes y el pueblo para que todo sea mejor, una especie de ciudadanía ejemplar, productiva y feliz. Yo lamento que exista tanto desorden, que falten modelos morales ejemplares. Creo que los principios y preceptos debemos acogerlos de los sabios de la antigüedad, de nuestros antepasados y de nuestros padres y abuelos - dijo Confucio.
  • Ahhh
  • También es importante la música, las funciones ceremoniales y religiosas y los cultos, junto al buen ejemplo.Una sociedad próspera si se mantienen estas relaciones en plena armonía, quiero que se recupere la sabiduría de los antiguos sabios de nuestra cultura china.
  • ¿Quienes son tus discípulos?
  • Son personas inteligentes y humildes, que se han superado, provenientes de distintos reinos. 
  • Lo importante es observar siempre el sendero superior del «Justo Medio». Tener en cuenta las dos clases de inclinación propias del hombre: la de la carne y la de la razón.
  •  ¿Y cual es tu objetivo final?
  • Obtener La Paz y la armonía  universal. Para obtener todo esto lo principal es el Ren o sea la Humanidad, esto se debe hacer a través de que nos convirtamos en caballeros honorables, para esto debemos tener unos códigos de etiqueta o rituales o Li,  


Igual que Sócrates, Confucio promulgaba que el reconocimiento de la ignorancia propia es la base del aprendizaje. Confucio se oponía a los privilegios de la herencia y estimuló la meritocracia ,

  • Definitivamente - dice Fadiman - el fue diferente al taoísmo que solo veía dos caras de la moneda, para el era una pirámide, en todo veía cuatro caras de la pirámide.

Nos dirigimos con él caminando, a veces en silencio y otra vez contando anécdotas a su casa, y reconocimos enseguida que aquí también quedará el cementerio donde están sus restos en Qufu (shandong) bordeado por cipreses milenarios y la fragancia a incienso y la interminable sucesión de losas escritas, de flores vivas y muertas, de árboles de copas verdinegras formando densas arboledas que no dejan ver los límites del camposanto, de pájaros (cuervos, urracas, mirlos). Este es un instante de una densidad irrepetible. Antes de despedirnos de Confucio lo sentimos más cerca de nosotros y nos dio ganas de releer las analectas ya que seguramente sonarán  de otra forma, con más ritmo, más sentido y más intensidad. Él intuyo nuestros deseos y nos dijo:

-¿No es agradable estudiar y poner más tarde en práctica lo aprendido?. ¿No es una delicia que lleguen amigos de lugares lejanos? 
-¿qué dices?
- Dedícate al estudio con placer, y con placer pon en práctica lo que sabes, regocíjate de ver de vez en cuando a los amigos, sobre todo si vienen de lejos y de otros tiempos y pueden hablarte del ancho mundo, y demuestra tu formación permaneciendo imperturbable ante la falta de reconocimiento de los demás.

Quedamos asombrados por su sabiduría, su inteligencia emocional y social.

  • Los hombres son todos semejantes por naturaleza, sólo difieren en los hábitos que contraen. 

Es que Confucio creía, como Aristóteles, que el hombre es un ser social. Fue un hombre tremendamente sociable, como Sócrates.

  • Las analectas se escribió como un manual de preguntas y respuestas - replicó Fadiman - Al igual que Platón, 

Lo que pude observar ya en su casa, cómo sus huéspedes, es que el comía frugalmente, eso si tomaba mucho alcohol fermentado de arroz, aunque nunca se emborrachaba. (Nosotros sí). Inclusive cuando se extasiaba de una melodía podía pasar en ayuno por días.

  • Maestro Confucio, a mi me llama la atención que contrario a lo que yo rezaba en mi credo de la Cámara Junior “los gobiernos deben ser más de leyes que de hombres” tú digas lo contrario.
  • Bueno mi enfoque es diferente porque yo parto del principio que “hombres” debe ser “caballeros honestos”, “Junzi”.  yo realmente desconfío de las leyes: las leyes invitan a las personas a volverse tramposas, y sacan lo peor de ellas. El pilar esencial del Estado es la confianza del pueblo en sus gobernantes: si se pierde esta confianza, el país está desgraciado. “Si los nombres no son correctos, si no están a la altura de las realidades, el lenguaje no tiene objeto. Si el lenguaje no tiene objeto, la acción se vuelve imposible y, por ello, todos los asuntos humanos se desintegran y su gobierno se vuelve sin sentido e imposible. De aquí que la primera tarea de un verdadero estadista sea rectificar los nombres”.
  • Ah es una versión más humanistica - dije-
  • Recuerden: Aprender algo y después ponerlo en práctica, tener amigos, no incomodarse cuando son ignorados sus méritos, respeta a tus padres y mayores, la charlatanería es mala. Cuando actúo en nombre de otros, ¿he sido digno de confianza? En mi relación con mis amigos, ¿he sido leal? ¿He practicado lo que se me ha enseñado. Hay que despachar los asuntos con dignidad y buena fe; ser frugal y amar a todos; movilizar al pueblo sólo en los momentos adecuados. Valora sobre todo la lealtad y la fidelidad. Cuando cometas una falta no tengas reparos en corregirla. Cuando se honra a los muertos y se mantiene viva la memoria de los antepasados remotos, la virtud de un pueblo se halla en su plenitud. Se cordial, amable, cortés, moderado y respetuoso. La armonía no puede buscarse por sí misma, ha de estar siempre subordinada a los ritos, los hábitos , las costumbres, de otro modo no funciona.
  • ¿Qué nos puedes decir de la muerte?, ya que tú veneras a tus antepasados, parece eso muy importante para ti, así como es el respeto a los mayores y sobre todo a los padres y enseñar con el ejemplo - pregunté -
  • ¿Si no conoces la vida, cómo puedes conocer la muerte?”
  • ¿ya no quieres hablar más?¿si no hablas, cómo podremos, pobres de nosotros, ser capaces de transmitir ninguna enseñanza?
  • ¿Acaso habla el Cielo? Sin embargo, las cuatro estaciones siguen su curso y las criaturas continúan naciendo. ¿Acaso habla el Cielo?». Sin duda ya he hablado demasiado.

Bueno ojalá nuestros gobernantes lean esto, o mejor las analectas de Confucio.



“ Los Lectores crean de nuevo los libros que leen. Shakespeare es hoy día más rico que cuando él escribía. Cervantes también. Cervantes fue enriquecido por Unamuno. Shakespeare fue enriquecido por Coleridge y Bradley. Así es como crece un escritor. Tras su muerte, continúa desarrollándose en la mente de sus lectores. Y la Biblia, por ejemplo, hoy día es más rica que cuando se escribieron sus diversas partes. Un libro se beneficia del paso del tiempo”. 

Jorge Luis Borges



“a pesar de toda su formidable erudición, el estudioso sencillamente «no tiene oídos», no podía oír lo que es tan obvio para cualquier lector sensible: el hecho de que subyace a todos los textos de los Evangelios una poderosa unidad de estilo de gran maestría, que procede de una voz única e inimitable; existe la presencia de una personalidad singular y excepcional, cuyas expresiones son tan originales y audaces que podrían calificarse positivamente de osadas”
Julien Gracq 



“Cuando un pueblo tiene buenas costumbres, las leyes se vuelven simples”
Montesquieu






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